La trabajadora de una clínica del paseo de Ronda (A Coruña) rellenó cuatro recetas de Hemicraneal 10 a nombre de la doctora sin su conocimiento. El tribunal ratifica el cese sin indemnización y deja la puerta abierta a posibles consecuencias penales.
La Sala del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) avala el despido disciplinario de una auxiliar que usó el sello de su empleadora y simuló su firma para emitir recetas que entregó a otra mujer. La empleada sostenía que el despido era improcedente y reclamaba 75.000 euros por vulneración del honor, pero el Superior confirma que los hechos acreditados justifican el cese sin indemnización.
El TSXG avala el despido disciplinario por falsificar recetas y usar sello en A Coruña
Según los hechos probados, la auxiliar trabajaba desde 2016 en una clínica privada del paseo de Ronda. Una paciente le pidió recetas de Hemicraneal 10 “con fechas diferentes y varias porque debía alguna en las farmacias”. La trabajadora, “sin consultarlo con la doctora y sin que la mujer hubiese sido atendida previamente por aquella”, imprimió recetas desde un PDF remitido por el colegio profesional y rellenó cuatro a nombre de la médica, fechadas entre enero y febrero de 2024. Además, estampó el cuño de su jefa y “firmó cada una de las recetas”.
¿Puede una empresa despedir sin indemnización por estos hechos? El tribunal responde que sí cuando se trata de fraude grave. De ahí que hable de una “falta muy grave”.
Procedimiento seguido por clínica, Xunta, colegio médico y juzgados gallegos hasta la resolución
La Xunta detectó las recetas irregulares. La jefa del servicio de Inspección de Servicios Sanitarios se dirigió al Colexio Oficial de Médicos da Coruña por la “supuesta prescripción farmacéutica irregular”, a nombre de la doctora. En mayo, el Colexio pidió a la facultativa su versión para elevarla a la junta directiva.
La doctora contactó con la auxiliar para que aclarase lo sucedido y le solicitó una carta admitiendo la firma. Reconoció que la trabajadora tenía su cuño “para hacer gestiones”, pero recordó que antes “me has dado a firmar todos los documentos y todas las cosas en las que figura mi nombre”. La empleada contestó que lo ponía en manos de su abogado. Posteriormente, a petición de la inspección de farmacia del Sergas, la empresa le concedió unos días de ausencia remunerada para investigar y, tras ello, la despidió por causas disciplinarias. Además, la doctora presentó denuncia ante la Policía Nacional, iniciándose diligencias previas en el Juzgado de Instrucción nº 7.
A continuación, se recogen las fechas y hitos clave para entender el recorrido del caso:
Fecha / Órgano | Hecho relevante | Resultado |
---|---|---|
Ene–Feb 2024 | Emisión de cuatro recetas de Hemicraneal 10 a nombre de la doctora | Uso del sello y firma simulada por la auxiliar |
Detección administrativa | Inspección de Sanidade traslada al Colexio de Médicos | Apertura de actuaciones y solicitud de explicaciones |
Investigación interna | Carta de la doctora y días de ausencia remunerada | Despido disciplinario por “falta grave” |
Vía penal | Denuncia ante Policía Nacional | Diligencias en el Juzgado de Instrucción nº 7 |
Primera instancia social | Juzgado de lo Social nº 6 | Despido declarado procedente |
Recurso | TSXG | Confirma el cese y califica “falta muy grave de fraude” |
En consecuencia, el hilo administrativo, laboral y judicial fue completo: detección, investigación interna, sanción empresarial y doble control judicial.
Quién puede verse afectado y qué implicaciones laborales y penales conlleva este tipo de conductas
El caso actúa como aviso a navegantes. El uso del sello o la firma de un superior sin autorización, y más para prescribir, acarrea despido disciplinario sin indemnización y puede tener recorrido penal. La versión de la trabajadora, que aseguraba contar con permiso, no prosperó: el juzgado constató que en ocasiones anteriores rellenó recetas ya impresas y utilizó el cuño en justificantes, pero no se acreditó autorización para estamparlo sin supervisión ni para firmar recetas simulando la rúbrica de la médica. Por tanto, el cese se mantiene.
La reclamación de 75.000 euros por supuesta vulneración del honor tampoco salió adelante. El TSXG confirma la sentencia que declara procedente el despido y subraya la gravedad del fraude.
En resumen, estas son las claves que deja la resolución y lo que significa para trabajadores y empresas:
- Despido disciplinario confirmado, sin derecho a indemnización por la gravedad de los hechos.
- Cuatro recetas entre enero y febrero de 2024 con sello y firma simulada.
- No quedó probada autorización para firmar ni usar el cuño sin supervisión.
- Intervinieron Xunta, Colexio de Médicos, Policía Nacional y órganos judiciales.
- El TSXG califica lo ocurrido como “falta muy grave de fraude”.
¿La lección? Extremar los controles internos y mantener procedimientos claros para el uso de sellos y documentación médica. Y, por parte del personal, ceñirse estrictamente a las tareas encomendadas. Lo contrario puede salir muy caro.