No habrá plazas de maestro en 2026 y esta es la razón por la que algunos docentes interinos, como María José, lo celebran

La Junta de Andalucía plantea que en 2026 no haya plazas para maestros de Primaria y que la oferta se concentre en Secundaria y Formación Profesional. El cambio retrasa a miles de aspirantes, pero algunos interinos creen que puede aliviar una bolsa saturada.

En la negociación con los sindicatos, la Consejería de Desarrollo Educativo defiende que Primaria puede “descansar” un año porque en 2025 ya hubo 7.655 plazas docentes, con más de 38.000 aspirantes, y porque esta especialidad lleva dos convocatorias seguidas, con 4.390 plazas en la última.

Por qué la Junta de Andalucía deja sin plazas a Primaria en 2026

El nuevo calendario prioriza otras enseñanzas. Para 2026, la Junta quiere centrar la oferta en especialidades de Secundaria y en el primer proceso en veinte años para catedráticos de instituto, lo que aplaza a los opositores de Primaria, como mínimo, hasta 2027.

¿Qué supone esto para quienes estaban estudiando ya el examen de Primaria? En la práctica, un año sin opción de conseguir plaza fija: solo queda mantenerse en la bolsa, encadenar sustituciones cuando lleguen y seguir acumulando méritos.

Ahí se sitúa María José, interina gaditana de 38 años. Lleva tres oposiciones seguidas con una nota media de 9 y, aun así, no ha logrado plaza. No ejerce desde 2021 y ahora trabaja en una tienda de ropa mientras espera poder volver al aula.

Cómo afecta la ausencia de oposiciones a la bolsa de interinos docentes

María José sostiene que, con la lista llena tras el COVID, “lo mejor es que no haya oposiciones”, porque solo así se sanea la bolsa y pueden trabajar los interinos que ya están dentro, en lugar de sumar nuevos aspirantes.

Entre las quejas que comparte con otros compañeros destacan estas ideas centrales:

  • El tiempo de servicio pesa poco frente a méritos como másteres caros o niveles altos de inglés, que ve más como un negocio que como una necesidad real en Primaria.

Señala que los másteres pueden rondar los 4.000 euros y que un nivel C1 de inglés suma solo medio punto en el baremo, algo que no ve lógico porque muchos colegios de Primaria ni siquiera son bilingües. A su entender, esto hace que “la plaza esté comprada” por quienes pueden costear más formación.

También lamenta que en el último proceso se readmitiera a personas que habían sido invalidadas pese a no cumplir un requisito de la convocatoria. Afirma que ella “tenía su plaza” y que, tras ese cambio, se quedó a solo 0,03 décimas de lograrla. ¿Cómo no va a generar frustración una situación así después de años de estudio?

Las nuevas prioridades de plazas para Secundaria y catedráticos a partir de 2026

Mientras Primaria queda sin oferta en 2026, la Junta dibuja un nuevo mapa de oposiciones aún sin cifra total de plazas, pendiente de cerrar la oferta pública de empleo de 2025 y la que pueda aprobarse a principios del próximo año.

Entre las líneas ya claras figura una oferta de 1.500 plazas de catedráticos de Secundaria, Idiomas, Artes Plásticas y Diseño, la primera en dos décadas, fruto de un acuerdo con los sindicatos, y el refuerzo de especialidades de Secundaria como matemáticas o informática.

Además, se prevé convocar especialidades que no aparecieron en la última oposición, como Educación Física, Orientación Educativa, Tecnología y Física y Química, junto con plazas de música, artes escénicas y para especialistas de Formación Profesional. El resultado es un cambio de foco hacia Secundaria y FP que deja a Primaria, al menos un año, en segundo plano.

Para verlo de un vistazo, este esquema resume qué cuerpos ganan protagonismo en 2026:

Cuerpo docenteSituación en 2026
Maestros de PrimariaSin plazas; se aplaza a 2027
Profesorado de SecundariaRefuerzo de varias especialidades
Catedráticos de Secundaria e IdiomasOferta de 1.500 plazas
Artes Plásticas, Diseño, Música y FPNuevas plazas en diversas ramas

En consecuencia, quienes preparan oposiciones deben decidir si mantienen su apuesta por Primaria o si se plantean cambiar de especialidad de forma temporal. No es precisamente un camino de rosas, pero es el escenario con el que muchos docentes andaluces tendrán que convivir en los próximos años.

Deja un comentario