Las estafas están a la orden del día y el número de víctimas a lo largo del mundo es casi incontable. Hoy, hablaremos de un caso en particular, sobre una modalidad de engaño llamada «La estafa del Monopoly», que en esta oportunidad tuvo como víctima a un hombre austríaco de 28 años, que era coleccionista de cartas Pokémon originales y tenía una colección valuada en 105.000 dólares. Se trata de una historia lamentable, que deja entrever la cantidad de personas ventajistas que hay en el mundo esperando a cometer este crimen, que se convirtió en moneda corriente en la actualidad.
Así cayó el coleccionista de cartas Pokémon en la «estafa Monopoly»
Tal y como informa el medio italiano Ill Messaggero, los hechos ocurrieron en octubre de este año, en Turín, Italia. La víctima habría establecido contacto con un hombre que, como él mismo describió, era una persona de origen sinti y hablaba perfectamente italiano. El estafador se había mostrado muy interesado en comprar la colección de cartas Pokémon que el joven tenía, la cual ofrecía en redes sociales a 110.000 euros. No obstante, durante los mensajes, este hombre le habría pedido al vendedor un descuento de 5.000 euros y él aceptó sin dudar.
Tras esta comunicación, quedaron en encontrarse para concretar la transacción, pero ahí comenzaron los problemas. El austríaco de 28 años cogió un avión en Viena, con destino a Italia. Cuando llegó a Turín, con sus cartas guardadas en un maletín, se citó con el falso comprador, quien le invitó a seguirle hasta un piso del barrio Mirafiori, en la periferia sur de la ciudad. Hablaron, tomaron un café, incluso intercambiaron bromas, sin saber que esa persona es quien iba a robarle su tan preciada colección.
El supuesto comprador le entregó un maletín con 105.000 euros y el austríaco le dio el suyo, con las cartas Pokémon. Las maletas fueron intercambiadas por un cómplice del estafador y todo parecía marchar bien, de acuerdo al plan. Sin embargo, cuando llegó al hotel, el chico de 28 años abrió el maletín y se dio cuenta de que, amargamente, en todos los billetes que había dentro figuraba el símbolo del Monopoly.
Al darse cuenta de este detalle, con mucha bronca y enojo, acudió a la comisaría de policía más cercana de su hotel. La denuncia que presentó el joven austríaco es por estafa, pero, por el momento, no ha dado resultado y el caso sigue abierto. Tampoco tiene más información sobre el estafador, que vuelve a poner sobre la mesa la «estafa Monopoly», popularizada en este último tiempo por miles de casos conocidos alrededor del mundo.
Proceso de investigación por este tipo de denuncias
Tal como dijimos anteriormente, el joven austríaco de 28 años hizo la denuncia pertinente, pero las novedades del caso todavía no llegan. Actualmente, la Justicia italiana intenta dar con el paradero del estafador y recuperar la valiosa colección de cartas Pokémon, aunque sin éxito. Cabe resaltar que resolver este tipo de estafa es bastante complicado y tedioso. Y esto se complica aún más por el hecho de que todo sucedió de forma física y no por redes sociales. Si sucediera en una plataforma de estas o en una aplicación en específico, el método de rastreo sería mucho más fácil.
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