La Seguridad Social había rechazado la incapacidad, pero el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha le reconoce una prestación de 1.138,28 euros al mes al considerar que su migraña crónica la incapacita para trabajar.
Tras años de migraña crónica que no remite con los tratamientos, la justicia le concede una pensión vitalicia de incapacidad permanente absoluta de 1.138,28 euros mensuales, algo que no es poca cosa.
Quién es la trabajadora que logra la pensión de incapacidad permanente absoluta
Esta trabajadora prestaba servicios en la sección de panadería de un supermercado y desde hace años sufre migraña crónica con crisis severas. Según la resolución judicial, la dolencia tiene un grave impacto en su vida diaria y ya no está en condiciones de desempeñar su trabajo ni otros empleos. ¿Cómo sostener una jornada completa cuando el dolor apenas da tregua?
El Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha reconoce la incapacidad permanente
El Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha revisa el caso después de que la Seguridad Social rechazara en varias ocasiones la incapacidad permanente solicitada. Frente a ese criterio, la Sala entiende que su situación hace «difícilmente imaginable que pueda realizar actividad profesional alguna» y que incluso los trabajos no físicos exigirían unos «mínimos de concentración, dedicación y eficacia» que ella no puede alcanzar.
Por tanto, confirma el grado de incapacidad permanente absoluta y el derecho a la pensión vitalicia, al considerar que las aptitudes que le restan no tienen relevancia suficiente para concertar un empleo retribuido en condiciones normales.
Los años de baja médica y los intentos fallidos ante la Seguridad Social
Entre 2019 y 2023, la trabajadora estuvo de baja médica más de tres años acumulados por migraña crónica. Tras la última baja, pidió la incapacidad permanente, pero la Seguridad Social rechazó su petición y, posteriormente, volvió a denegarle el acceso a la pensión, lo que la llevó a acudir a los tribunales. El Juzgado de lo Social número 4 de Toledo le dio la razón y reconoció la incapacidad permanente absoluta, decisión que la Seguridad Social recurrió sin éxito, porque el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha confirmó la sentencia.
El recorrido del caso puede resumirse en la siguiente tabla:
| Fase del caso | Descripción breve |
|---|---|
| 2019-2023 | Más de tres años de baja por migraña crónica. |
| Solicitud de incapacidad permanente | Petición de pensión tras la última baja médica. |
| Resoluciones de la Seguridad Social | La Seguridad Social rechaza en varias ocasiones la prestación. |
| Juzgado de lo Social número 4 de Toledo | El juzgado reconoce la incapacidad permanente absoluta. |
| Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha | El tribunal superior confirma la pensión vitalicia. |
Este resumen refleja un proceso largo hasta el reconocimiento de la pensión.
Qué significa una pensión de incapacidad permanente absoluta para la vida laboral
¿Qué supone, en la práctica, esta pensión para su futuro laboral? El tribunal recuerda que, para conceder una incapacidad permanente en grado de absoluta, la persona afectada no debe estar «en condiciones de acometer ningún quehacer productivo», porque las limitaciones le impiden mantener un empleo con un mínimo de profesionalidad, rendimiento y eficacia.
La sentencia repasa su historial médico y señala que presenta una cifra muy elevada de días de migraña severa al mes y puntuaciones muy altas en escalas de calidad de vida, lo que se traduce en «un importante deterioro en su calidad de vida y una discapacidad severa en los diversos ámbitos de su vida personal».
El tribunal tiene en cuenta que:
- La migraña crónica no responde a los tratamientos y provoca numerosos días de dolor severo que le impiden trabajar.
En definitiva, la resolución reconoce que la migraña, cuando es persistente y severa, puede llegar a incapacitar por completo a una persona para trabajar. La panadera obtiene así una pensión vitalicia de 1.138,28 euros mensuales que compensa, en la medida de lo posible, la imposibilidad de continuar su vida laboral.
