El Gobierno pone en marcha un ambicioso “Plan de Respuesta y Relanzamiento Comercial” con el objetivo de proteger a las empresas españolas y reorientar la producción en un nuevo contexto global.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado la movilización de 14.100 millones de euros para que las empresas españolas puedan resistir y adaptarse a la reciente guerra arancelaria iniciada por Estados Unidos. Se trata de un paquete de medidas que busca, por un lado, atajar el impacto inmediato de los nuevos impuestos a la importación y, por otro, reorientar la capacidad productiva hacia mercados con mayor demanda.
Este plan, bautizado como “Plan de Respuesta y Relanzamiento Comercial”, se compone de 7.400 millones de euros de nueva financiación y otros 6.700 millones reencauzados desde fondos ya aprobados. ¿El propósito? Facilitar préstamos, avales y ayudas que garanticen la continuidad de la actividad y protejan a los empleados de los sectores más perjudicados.
Las dos líneas principales de actuación sociolaboral para combatir los nuevos aranceles de Trump
En primer lugar, el Gobierno ha reforzado el Fondo de Apoyo a la Inversión Industrial Productiva con 200 millones de euros adicionales, destinados a préstamos y participación en capital que ayuden a modernizar o crear nuevas instalaciones. Además, se activan dos líneas de avales y financiación intermediada del ICO (usado también para viviendas) por valor de 6.000 millones, con el fin de cubrir las necesidades de circulante y garantizar la viabilidad de las empresas exportadoras.
Por otro lado, se ha anunciado el nuevo Plan MOVES, dotado de 400 millones de euros, para apoyar especialmente al sector automovilístico frente al arancel del 25% anunciado por la Administración Trump. El objetivo es incentivar la transición hacia modelos más sostenibles y, al mismo tiempo, preservar los puestos de trabajo.
Cómo impactará la nueva medida económica de Pedro Sánchez en el sector automovilístico y otros afectados
El automovilístico no es el único sector que soporta los gravámenes impuestos por Estados Unidos. De acuerdo con el propio Ejecutivo de Pedro Sánchez, también sufren de lleno la industria farmacéutica, la agroalimentaria, el acero, la madera y los semiconductores. Para dar un ejemplo claro de las acciones tomadas, a continuación se muestra una tabla con algunas de las medidas clave y sus dotaciones:
Medida | Dotación |
---|---|
Fondo de Apoyo a la Inversión Industrial Productiva | 200 millones de € |
Nuevas líneas de avales y financiación intermediada del ICO | 6.000 millones de € |
Plan MOVES para el sector automovilístico | 400 millones de € |
Recanalización de fondos europeos hacia sectores más afectados | 5.000 millones de € |
Coberturas de riesgo y seguros de crédito a la exportación | 2.000 millones de € |
Estas iniciativas pretenden, de una parte, proteger la actividad productiva actual y, de otra, impulsar la adaptabilidad a los cambios arancelarios globales.
El mecanismo RED y la importancia de la protección sociolaboral en la guerra comercial actual
Junto a las ayudas económicas, Sánchez ha presentado la activación del mecanismo RED, que permite ajustar la jornada laboral o suspender contratos de forma temporal. Este dispositivo, similar a los ERTE de la pandemia, busca salvaguardar a la plantilla mientras dura la incertidumbre de la guerra comercial.
¿Te parece suficiente para garantizar la tranquilidad de los trabajadores? El Ejecutivo confía en que este instrumento, sumado a la Mesa de Diálogo Social con patronal y sindicatos, facilite acuerdos que eviten despidos masivos.
Estrategias para reorientar la producción nacional y ampliar la internacionalización de las pymes españolas
El plan del Gobierno también dedica 5.000 millones de euros a reencaminar el tejido productivo hacia sectores con alta demanda internacional, abriendo la puerta a nuevos mercados para contrarrestar los aranceles. Además, se invertirán 2.000 millones de euros en coberturas de riesgo y 500 millones en la internacionalización de las pymes, con el apoyo del ICEX para afianzar o ampliar la presencia de las empresas españolas en Estados Unidos y en otros destinos estratégicos.
De forma paralela, Sánchez insiste en que la Unión Europea adopte medidas urgentes y flexibles para afrontar esta situación: desde un fondo especial de ayuda financiado con la recaudación arancelaria comunitaria, hasta la ratificación definitiva del acuerdo con Mercosur.