Las autoridades de tráfico han confirmado la implantación de controles selectivos y dinámicos con tecnología DSRC, capaces de realizar inspecciones remotas a vehículos y reforzar la vigilancia de la ITV en carretera, especialmente en la AP-7 catalana. Te contamos cómo funcionan y qué implican para conductores y transportistas.
Las nuevas medidas suponen un cambio importante en la forma de controlar lo que ocurre en carretera. No se trata solo de más radares o más controles: ahora entran en juego dispositivos capaces de comunicarse con los vehículos en marcha y revisar a distancia datos clave, con el objetivo de reducir la siniestralidad en una de las vías más conflictivas de España.
Así funcionarán los nuevos controles selectivos con tecnología DSRC en la AP-7
El Servicio Catalán de Tráfico (SCT) ha apostado por sistemas DSRC para reforzar los controles preventivos, selectivos y dinámicos. ¿Qué significa esto para el conductor que circula por la AP-7?
La tecnología DSRC se basa en comunicaciones de corto alcance dedicadas entre vehículos y la infraestructura de la vía. Permite el intercambio de datos en tiempo real, como los procedentes del tacógrafo inteligente en vehículos pesados, sin necesidad de detenerlos de inmediato. En la práctica, los dispositivos instalados en carretera pueden “leer” esa información mientras el camión circula y señalar solo a aquellos que presentan posibles irregularidades.
La Generalitat dispone ya de 10 aparatos DSRC y tiene previsto incorporar más. Estos equipos se utilizarán como filtro previo: primero se detectan las posibles infracciones a distancia y, posteriormente, los Mossos d’Esquadra seleccionan qué vehículos se deben parar para una inspección más detallada. De ahí que se hable de controles mucho más selectivos y menos aleatorios.
Medidas aprobadas por la Generalitat para reducir la alta siniestralidad en la AP-7
El paquete de actuaciones llega tras confirmarse 15 fallecidos en accidentes en la AP-7 en lo que va de 2025, más del doble que en 2024. Ante esta situación, el SCT ha decidido pasar a la acción combinando cambios en los límites de velocidad, nuevos radares y el uso de tecnologías avanzadas.
Uno de los puntos clave es la reducción de la velocidad en el tramo de Torres de l’Ebre, entre Calafat (l’Ametlla de Mar) y Amposta, en sentido sur. A partir de diciembre, el límite será de 100 km/h para turismos y de 80 km/h para camiones, una medida que, en principio, se mantendrá hasta el 31 de marzo, cuando se evaluará su eficacia con la posibilidad de prorrogarla.
Para verlo de un vistazo, estas son las principales actuaciones previstas en la AP-7:
| Medida principal | Detalle de la actuación |
|---|---|
| Reducción de velocidad en Torres de l’Ebre | 100 km/h para vehículos ligeros y 80 km/h para camiones hasta, al menos, el 31 de marzo |
| Nuevos carro radares | Instalación de hasta 6 equipos que vigilarán de forma dinámica la velocidad en la AP-7 |
| Implementación de sistemas DSRC | Controles preventivos y selectivos con 10 dispositivos, ampliables en los próximos meses |
| Refuerzo de controles de ITV en carretera | Mayor vigilancia en vehículos que ya han pasado la ITV, para detectar defectos adicionales |
Como ves, no se trata de una sola medida aislada, sino de un conjunto de cambios que buscan atajar la siniestralidad desde varios frentes a la vez.
Inspecciones remotas de tacógrafo e ITV y principales infracciones que se vigilarán
Una parte importante de los siniestros en la AP-7 está relacionada con el intenso tráfico de vehículos pesados. Por eso, el uso de DSRC se centrará especialmente en camiones, aprovechando la información del tacógrafo inteligente.
Gracias a la comunicación a corta distancia, los dispositivos podrán revisar a distancia datos sobre tiempos de conducción, descansos y posibles manipulaciones sin necesidad de detener inicialmente cada vehículo. Solo aquellos que presenten indicios de irregularidad serán seleccionados para un control más completo en carretera. Es decir, menos controles “al azar” y más foco en quienes dan señales de incumplir la normativa.
Entre las infracciones que se pretende detectar con más precisión destacan:
- Excesos de tiempo de conducción, falta de descansos, posibles manipulaciones del tacógrafo y fallos en los dispositivos de control de los transportistas.
En paralelo, el Departamento de Interior ha advertido de que, aunque los vehículos hayan superado la ITV, alrededor de un 45% presenta algún defecto cuando se revisan en controles en carretera. Por ese motivo, se intensificarán los controles sorpresa de ITV, tanto en Cataluña como en el resto de España, donde la DGT ya realiza este tipo de actuaciones.
Qué deben saber conductores y transportistas sobre estos nuevos sistemas de control
Además del ámbito catalán, el Ministerio de Transportes ha dotado a la Guardia Civil de nuevos dispositivos DSRC para hacer inspecciones remotas en vehículos en movimiento en todo el país, especialmente camiones. En otras palabras: la vigilancia a distancia no se limitará a la AP-7, sino que se irá extendiendo progresivamente.
Para el conductor particular, eso se traduce en la necesidad de respetar aún más los límites de velocidad y el buen estado del vehículo, incluida la ITV. Para los profesionales del transporte, la clave estará en cumplir escrupulosamente los tiempos de conducción y descanso, así como en mantener los tacógrafos en perfecto estado y sin manipulaciones.
¿La conclusión más clara? Toca acostumbrarse a una carretera donde los controles son menos visibles, pero mucho más precisos. La teledetección y las inspecciones remotas han llegado para quedarse y, si todo va según lo previsto, deberían traducirse en menos accidentes y una mejora real de la seguridad vial.
