Margaret Houghton, de 65 años y residente en Warrington (Inglaterra), viajó a Egipto con su marido, su hija y sus tres nietos para disfrutar de unas vacaciones inolvidables. Sin embargo, lo que empezó como un viaje de ensueño se convirtió en una auténtica pesadilla financiera cuando fue hospitalizada por neumonía y los gastos médicos superaron los 27.000 libras (unos 32.000 euros).
Cómo un seguro de viaje insuficiente generó una deuda de 32.000 euros en Egipto
La familia Houghton contrató un seguro de viaje con la esperanza de estar protegida ante cualquier percance, pero no podían imaginar que dicho seguro no cubriría la totalidad de los gastos hospitalarios. Al parecer, pagaron una prima de 165 libras esterlinas (más de 195 euros) que, a priori, parecía suficiente para una estancia de dos semanas. ¿El problema? Según la compañía, se detectaron “discrepancias” en el historial médico de Margaret y, por ese motivo, solo se harían cargo del 67% de la factura total.
Esto se traduce en que la familia debe abonar la cantidad restante, que ronda los 10.000 euros. Margaret permanece ingresada en el Hospital Sharm Peace, en Sharm El-Sheikh, para recuperarse de la infección bacteriana que le ocasionó la neumonía. Mientras tanto, el plazo de su visado comienza a agotarse, lo que añade otra capa de preocupación, ya que podría tener que salir del país antes de completar su tratamiento.
Por qué la familia solicita ayuda pública y solidaria para costear la recuperación
¿Te imaginas tener que recaudar miles de euros para poder volver a casa? Es la situación que describe la nuera de Margaret, Aileen Houghton, al explicar que han iniciado una campaña de recaudación de fondos a través de una plataforma online. De momento, han conseguido unas 2.000 libras (alrededor de 2.400 euros) gracias a donaciones solidarias, aunque estiman que aún les quedan aproximadamente 8.600 libras (unos 10.200 euros) para cubrir todos los gastos.
Otro factor que les preocupa es la situación laboral de Dave y Kate, marido e hija de Margaret, que han tenido que alargar su estancia en Egipto. Al no poder volver a tiempo a Inglaterra, temen perder sus empleos y, por consiguiente, ver en riesgo el pago de sus hipotecas. Con este panorama, no es de extrañar que la familia busque cualquier fórmula posible para costear la deuda y garantizar la salud de Margaret.
A continuación, se presenta una breve tabla con los principales conceptos de la factura y el porcentaje que cubre el seguro:
Concepto | Importe Estimado | Cobertura del Seguro | Resto a Pagar |
---|---|---|---|
Tratamiento Hospitalario | 27.000 € | 67% | 8.910 € |
Transporte y Otros Gastos | 5.000 € | 67% | 1.650 € |
Coste Total Estimado | 32.000 € | 67% | 10.560 € |
Tal y como muestra la tabla, la familia se ve obligada a cubrir la diferencia, lo que supone un esfuerzo económico enorme si se tiene en cuenta que están lejos de casa y con recursos limitados.
Recomendaciones para evitar sorpresas económicas durante unas vacaciones en el extranjero
Antes de viajar al extranjero, muchos turistas confían en el seguro de viaje sin revisar detenidamente las condiciones de la póliza. De ahí que sea imprescindible leer la letra pequeña y declarar cualquier enfermedad preexistente o condición de salud que pudiera aumentar el coste de la prima.
A continuación, se incluye una breve lista de consejos para prevenir este tipo de problemas:
- Revisar las cláusulas de exclusión del seguro (por ejemplo, enfermedades crónicas o preexistentes).
- Comparar varias pólizas y seleccionar la que mejor se adapte a las necesidades familiares.
- Comprobar la cobertura máxima en caso de hospitalización, accidentes o repatriación.
- Llevar todos los informes médicos en el equipaje para facilitar trámites ante cualquier incidencia.
Aunque cada aseguradora puede tener sus propias normas, lo cierto es que detectar y declarar cualquier posible condición médica antes de contratar el seguro puede salvar a las familias de situaciones tan complicadas como la que vive actualmente Margaret. Por otro lado, la importancia de pedir asesoramiento y recabar varias opiniones antes de elegir la póliza adecuada no puede subestimarse.
En definitiva, la historia de esta jubilada británica pone sobre la mesa la necesidad de extremar la precaución con los seguros de viaje y la documentación que se presenta. “Nadie piensa que le vaya a ocurrir algo así durante sus vacaciones”, señalan desde el entorno de Margaret, pero la realidad es que un descuido en la declaración de salud puede acabar provocando una carga financiera difícil de sobrellevar.