A partir de 2026, Tráfico prevé desplegar radares móviles “sobre ruedas” en carreteras españolas para reforzar la seguridad en tramos de riesgo y zonas de obras.
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, avanzó en rueda de prensa del 3 de septiembre que la DGT trabaja para implantar estos dispositivos el próximo año. ¿Por qué importa? Porque permitirán controlar puntos críticos con mayor rapidez y reducir la siniestralidad estival que ha encendido las alarmas.
El plan de la DGT pasa por incorporar estos radares móviles con ruedas en 2026, inspirándose en el modelo francés. Serán desplazables y se ubicarán donde más falta hagan: autopistas, carreteras secundarias y, especialmente, obras. El objetivo declarado es claro: más prevención y menos accidentes.
Radares móviles con ruedas de la DGT para zonas de obra y tramos de riesgo: cuándo llegan y por qué son necesarios
Según Marlaska, “nuestro propósito es implantarlos el año que viene”. Antes, el director general de Tráfico, Pepe Navarro, realizará una comprobación en Francia para afinar el despliegue. Allí ya operan “más de un centenar de radares” destinados a “controlar los tramos de riesgo”.
Estos equipos actúan, sobre todo, en obras de dos o tres kilómetros, avisando de la necesidad de reducir la velocidad por el estado de la vía o por la presencia de operarios. De ahí que su principal ventaja sea la movilidad: “estarán sobre unos dispositivos con ruedas y pueden ser fácilmente desplazables a los tramos donde se precise”.
Lista rápida de claves del nuevo sistema (resumen en un vistazo):
- Llegada estimada: año 2026 en carreteras españolas.
- Uso prioritario: obras y tramos con alta siniestralidad.
- Ventaja principal: movilidad y despliegue inmediato según riesgo.
- Referencia internacional: experiencia previa en Francia.
- Meta final: reducir accidentes y mejorar la seguridad vial.
Estos puntos no sustituyen a otras herramientas; las complementan. En 2025, la DGT tiene previsto instalar 120 nuevos radares fijos o de otro tipo, de los que 72 ya se activaron en los operativos de verano. Por tanto, el refuerzo será doble: tecnología fija y tecnología móvil.
Cómo se integrarán los nuevos radares con ruedas con el resto de vigilancia y medidas de seguridad vial
Además de los radares, los nueve helicópteros de vigilancia, en tierra desde el 1 de septiembre, “pronto estarán de nuevo volando y también participando en la seguridad vial”, según confirmó el ministro. En consecuencia, el esquema de control combinará medios aéreos, radares tradicionales y las nuevas unidades móviles con ruedas.
El plan llega acompañado de otra medida de calado: la reducción de la tasa máxima de alcohol en sangre de 0,5 g/l a 0,2 g/l. Marlaska la considera “inaplazable” por salud pública y seguridad, recordando que en el 48% de las autopsias practicadas a conductores se detecta alcohol, drogas o psicofármacos. ¿Hace falta más aviso para levantar el pie y evitar riesgos?
A modo de guía rápida, este cuadro sintetiza el calendario y los frentes de actuación anunciados:
Medida o herramienta | Estado y horizonte temporal |
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120 nuevos radares (2025) | 72 ya instalados y operativos en verano de 2025 |
Helicópteros de vigilancia | Previsto retorno a vuelo “pronto” tras estar en tierra desde 1 de septiembre |
Radares móviles con ruedas | Implantación estimada en 2026, tras revisión del modelo francés |
Tasa máxima de alcohol | Intención de reducirla de 0,5 g/l a 0,2 g/l durante este año |
En definitiva, el mensaje es directo: más control donde hay más peligro. Y, además, más pedagogía. Como apuntó el ministro, a quien piensa que “una cerveza no le supone nada”, conviene recordarle que al volante los reflejos no son los mismos y las consecuencias pueden ser irreparables.
Los conductores verán más presencia de control en tramos concretos y en periodos sensibles, especialmente en obras. ¿La buena noticia? Conducir a la velocidad señalada y con cero alcohol evita sorpresas. Por otro lado, la movilidad de los dispositivos significa que no habrá “puntos ciegos” habituales: el control irá donde esté el riesgo.