La DGT hará obligatoria la baliza V16 desde enero de 2026, en sustitución de los triángulos. La medida, que afectará a todos los conductores en España, llega acompañada de críticas: el influencer y director editorial de Carwow, Juan Francisco Calero, ha difundido ocho motivos para cuestionarla.
A partir del año que viene, la baliza V16 deberá ir en el vehículo. Según se ha contado en Libre Mercado, esta obligación también supondrá más de 300 millones de euros de ingresos para la Agencia Tributaria. ¿Conviene comprarla ya? ¿Qué alegan sus detractores?
Quién debe llevar la baliza V16 y por qué la DGT la impone desde 2026
La norma afecta a conductores de vehículos españoles desde enero de 2026, cuando la V16 sustituirá a los triángulos. Calero subraya que el cambio no alcanza a todos por igual: la nueva obligación solo rige para vehículos españoles; los no españoles podrán seguir usando triángulos. De ahí que buena parte del debate se centre en su utilidad real y su coherencia con la seguridad vial. ¿Resolverá un problema o creará otros?
¿Cuáles son las ocho razones esgrimidas por Juan Francisco Calero para rechazar la baliza V16? En un vídeo difundido por la cuenta de Carwow en X (Twitter), el experto expone sus críticas. Entre ellas destaca una frase contundente: “la baliza tiene tremendas carencias técnicas. En cambios de rasante, o en curvas, es imposible verla y es peor que los triángulos”. A partir de ahí, plantea el siguiente catálogo de objeciones.
A continuación, resumimos los puntos principales. Tras la lista, detallamos fechas, procedimiento y organismos implicados.
- Se aplicará solo a vehículos españoles; los no españoles podrán seguir con triángulos.
- No hay datos que vinculen triángulos con más atropellos; falta respaldo de la DGT.
- Carencias técnicas en visibilidad: peor en cambios de rasante y curvas.
- Normativa “tan laxa” en luminosidad que convivirán balizas muy desiguales.
- Existen mecanismos mejores ya integrados: la llamada de emergencia eCall.
- Se propone una alternativa: app móvil gratuita para enviar ubicación.
- Depende de pilas; riesgo de que esté descargada cuando se necesite.
- Falta de campaña informativa pese a tratarse de una cuestión de seguridad.
Como ves, el debate no es menor. ¿No sería razonable exigir estándares más homogéneos antes de imponer el cambio?
Cómo y cuándo se aplicará la obligación de la baliza V16 y qué alternativas se plantean
El calendario es claro: en enero de 2026 la V16 pasará a ser obligatoria para los vehículos españoles, sustituyendo a los triángulos. Calero recuerda que ya “todos los coches modernos obligatoriamente tienen la llamada de emergencia (ecall)” y sugiere además una aplicación gratuita para compartir ubicación. Por tanto, el foco no está solo en “qué” llevar, sino en “cómo” garantizar que el aviso funcione de verdad cuando hay un incidente en carretera.
¿Cuál es el procedimiento para cumplir la nueva normativa de la DGT y consejos prácticos? Para ajustarse a la norma bastará con llevar la baliza V16 en el coche desde enero de 2026, en lugar de los triángulos si el vehículo es español. Entre las consideraciones prácticas que señala el experto: la baliza requiere pilas y puede estar descargada; además, critica que la regulación de luminosidad sea “tan laxa”. En el plano institucional, intervienen la DGT (como regulador) y la Agencia Tributaria, que obtendría más de 300 millones en ingresos ligados a la medida.
Antes de decidir, puede ayudar esta comparativa resumida con los elementos citados por el experto:
| Aspecto clave | Triángulos | Baliza V16 |
|---|---|---|
| Ámbito de aplicación en 2026 | Permitidos para vehículos no españoles | Obligatoria para vehículos españoles |
| Visibilidad en curvas/rasantes | Mejores que la baliza según la crítica | “Imposible verla” en curvas y “peor que los triángulos” |
| Alimentación y fiabilidad | Analógicos, sin pilas | Requiere pilas; riesgo de descarga |
| Exigencias de luminosidad | — | Normativa “tan laxa” con muchos niveles legales |
| Impacto fiscal asociado | — | Más de 300 millones para la Agencia Tributaria |
En consecuencia, el dilema no es solo técnico: también tiene aristas económicas y de comunicación pública. ¿Habrá una campaña clara que explique cómo usarla y qué modelo elegir? Por ahora, el experto lamenta que no se haya visto.
