La búsqueda de un lugar donde aparcar puede ser una de las actividades al volante que más ansiedad provoca. Esto se complica en algunas zonas urbanas, donde conseguir una plaza disponible es una misión casi imposible. Ante dicho escenario, se producen muchas conductas poco ejemplares que van en contra de las leyes de tráfico. Padres que paran el coche en doble fila para dejar a su hijo en el colegio o incluso peatones que guardan sitios para que un familiar o un amigo aparque. Por más que suene ilógico, son situaciones muy frecuentes en las calles de España. Entonces, ¿qué debo hacer si un peatón está guardando una plaza disponible para aparcar a otro coche?
Colocarse en medio de una plaza libre para aparcar genera conflictos tensos entre los conductores de los coches y los peatones. Quienes se ven envueltos en este tipo de situaciones, se preguntan qué tan legal es que una persona guarde lugar de estacionamiento para otra persona. Por suerte, hay una disposición legal vigente que aclara este asunto y, además, establece algunas medidas que podrías tomar al respecto.
¿Qué dice el reglamento sobre los peatones que guardan la plaza para aparcar a otros coches?
El Reglamento General de Circulación, en su artículo 122.6, establece que los peatones no tienen permitido permanecer detenidos en la calzada ni en el arcén, salvo que sea algo estrictamente necesario para acceder a un coche que esté ya a su altura. En ese sentido, las autoridades resaltan que guardar plazas para aparcar por parte de peatones es ilegal y puede ser motivo de duras sanciones. De hecho, la Real Automóvil Club de España (RACE) aclara que un peatón que bloquee una plaza para un coche podría enfrentarse a una multa de 80 euros si la Policía Local interviene.
La recomendación para los conductores que se enfrentan a este tipo de situaciones es mantener la calma y evitar enfrentamientos innecesarios. En caso de que el peatón persista en bloquear ese lugar de estacionamiento, lo mejor será llamar a las autoridades. Los agentes de tránsito pueden sancionar al peatón por invadir la calzada, ya que representa una clara infracción administrativa.
Vehículos en doble fila: el problema de tránsito más frecuente
Además de los peatones que guardan plazas disponibles para aparcar, hay otro gran problema en las calles: los coches en doble fila. Esta es una acción muy común, sobre todo cuando no se encuentra un lugar disponible para estacionar. Para estos casos, la normativa de la Dirección General de Tráfico (DGT) establece claras limitaciones para evitar que los vehículos obstaculicen la circulación. Asimismo, se pueden imponer multas de hasta 200 euros.
Pero aquí también hay que aclarar algunas cuestiones importantes. Resulta fundamental diferenciar entre una parada y un estacionamiento. La primera implica una detención breve, con el conductor dentro del vehículo, mientras que el segundo implica abandonar el coche en doble fila, lo que sí es sancionable. En el primer caso, se permite que el coche esté en doble fila, pero solo si el conductor se mantiene dentro de su vehículo y no supera los dos minutos. Además, no debe obstaculizar la circulación del tráfico. Esto quiere decir que, en el momento en que la persona abandona el vehículo, ya está cometiendo una infracción clara, digna de una sanción.
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