La silicosis puede definirse como una enfermedad pulmonar crónica irreversible, resultante de la inhalación de polvo de sílice cristalina. Su origen se encuentra en la presencia de un mineral que está presente en diversos productos, como por ejemplo en las encimeras de cuarzo. Recientemente, se ha asociado el incremento de casos de silicosis a la manipulación de productos que contienen este mineral. Se han reportado casos en diferentes países como son por ejemplo:
- España.
- Israel.
- Italia.
- Estados Unidos.
- China.
- Australia.
- Bélgica.
¿Qué es la silicosis y cómo se desarrolla?
La silicosis es un tipo de neumoconiosis que se produce por la inhalación intensa de una gran cantidad de partículas de sílice cristalina respirable. Debido a la toxicidad de éstas, su deposición desencadena una respuesta inflamatoria que favorece la formación de tejido cicatrizal, produciendo una disminución de la capacidad pulmonar y de la función respiratoria.
Los síntomas, entre otros, comprenden la tos persistente, la disnea, las formas más avanzadas e incluso la posible insuficiencia respiratoria. En efecto, la silicosis ha sido tradicionalmente considerada una enfermedad propia de los trabajadores de actividades como la minería, los de la explotación de canteras y los trabajadores de la construcción de túneles.
La creciente popularización de la manipulación de encimeras de piedra de composición artificial ha logrado llevar a cabo la exposición de otros colectivos de trabajadores al polvo de sílice cristalina.
La manipulación de estos materiales en que el porcentaje de sílice cristalina es alto, exonera con polvo respirable que se inhalado por estas fracciones sin medidas de protección eficaces, lingüísticamente aumenta la probabilidad de contraer silicosis.
Diagnóstico y formas clínicas de la silicosis
El diagnóstico de la silicosis se basa en la historia laboral del paciente, síntomas clínicos y hallazgos radiológicos. Las pruebas incluyen radiografías de tórax, tomografías computarizadas y pruebas de función pulmonar. La enfermedad se clasifica en:
- Silicosis crónica: Aparece tras más de 10 años de exposición a bajas concentraciones de sílice. Se subdivide en simple y complicada, esta última con mayor afectación pulmonar.
- Silicosis acelerada: Se desarrolla entre 5 y 10 años después de exposiciones a concentraciones más altas de sílice. Presenta síntomas similares a la forma crónica, pero con una progresión más rápida.
- Silicosis aguda: Es la forma menos común y más grave, desarrollándose en semanas o pocos años tras exposiciones masivas. Provoca inflamación y acumulación de proteínas en los pulmones, llevando a una insuficiencia respiratoria severa. (Archivos de Bronconeumología).
Medidas preventivas y regulaciones internacionales
Ante el aumento de los casos, Australia se ha visto obligada a prohibir la piedra artificial de alto contenido en sílice. El Reino Unido, por su parte, considera aplicar regulaciones incluso más estrictas que las existentes.
La implementación de medidas de control de polvo, de equipos de protección personal y de programas de vigilancia de la salud son necesarias para que la enfermedad no siga incrementando su prevalencia. La silicosis es evitable, es vital que se implementen medidas de seguridad y que los materiales de riesgo sean regulados estrictamente para garantizar la salud de los trabajadores.
Según el despacho de abogados Opamianto, las proyecciones indican que, para finales de 2024, el número total de casos podría superar los 500, lo que representa un incremento significativo en comparación con años anteriores.