La Seguridad Social endurece las reglas de la jubilación anticipada: algunos pensionistas perderán hasta un 21% de su pensión

La reforma de pensiones vigente en 2025 endurece los recortes y afectará incluso a quienes acreditan más de 40 años cotizados.

Planificar la jubilación vuelve a moverse en terreno resbaladizo. La Seguridad Social confirma que quienes decidan retirarse de manera voluntaria hasta 24 meses antes de la edad ordinaria verán mermada su paga hasta un 21 %. ¿El objetivo? Desincentivar salidas tempranas y proteger la sostenibilidad del sistema público.

Solo los trabajadores con carreras de cotización «largas» (al menos 38 años y 3 meses) pueden plantearse dar el paso dos años antes. Sin embargo, incluso con este historial ejemplar, la penalización se aplica porque el beneficiario cobrará la prestación durante más tiempo del previsto inicialmente. De ahí que el sistema ajuste la cuantía para mantener el equilibrio financiero. ¿Compensa entonces anticipar el retiro? La respuesta varía según cada bolsillo y, sobre todo, según el margen de tiempo que se adelante.

Edad ordinaria de retiro y plazos clave que introduce la reforma de 2022 vigente

En 2025 la edad ordinaria vuelve a dividirse en dos escalones. Con 38 años y 3 meses cotizados se mantiene en 65 años; quienes no alcancen ese umbral deberán esperar hasta los 66 años y 8 meses. Adelantar la jubilación continúa limitado a un máximo de 24 meses respecto a la edad que le corresponda a cada trabajador.

Por tanto, si tenías en mente colgar las botas a los 63 años, ¡ojo!, primero comprueba cuántos años tienes reconocidos en tu vida laboral para evitar sorpresas desagradables.

Procedimiento paso a paso para adelantar la jubilación sin perderse en el papeleo

El trámite puede realizarse de forma presencial, pidiendo cita previa en el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS), o bien online a través del portal Tu Seguridad Social. Antes de presentar la solicitud conviene reunir la siguiente documentación:

  • DNI o NIE vigente, informe de vida laboral actualizado, formularios oficiales de jubilación anticipada, y certificados de empresa que acrediten la fecha del último día trabajado.

Entregados los papeles, el INSS revisa requisitos y calcula la base reguladora aplicando el coeficiente reductor mensual correspondiente. El organismo responde por escrito; si falta algo, tendrás un plazo de diez días para subsanarlo. Posteriormente, recibirás la resolución con la cuantía definitiva y la fecha desde la que empieza a devengarse la pensión.

Coeficientes reductores mensuales: así queda la pensión tras el anticipo solicitado

Los coeficientes funcionan como una escala decreciente: cuanto más se adelante la jubilación, mayor será el recorte. El rango parte de un 2,81 % para quienes solo adelanten un mes y se dispara hasta el 21 % al agotar los 24 meses de anticipo. La siguiente tabla resume los extremos:

Anticipación respecto a la edad ordinariaCoeficiente reductor aplicado
1 mes2,81 %
24 meses21 %

Entre ambos valores, la reducción progresa de forma mensual. Además, la pensión resultante debe superar siempre la pensión mínima que correspondería al beneficiario al cumplir 65 años según su situación familiar. Por consiguiente, puede suceder que el recorte sea menor al máximo si, tras aplicar la resta, la prestación quedase por debajo del umbral mínimo.

En definitiva, jubilarse antes sigue siendo posible, pero ya no saldrá gratis. Quienes planeen anticipar el retiro tienen que hacer bien sus cuentas, estudiar todas las alternativas (como retrasar unos meses para reducir el castigo) y, sobre todo, solicitar un cálculo previo al INSS. Así evitarán sustos cuando llegue la carta con la cantidad definitiva. ¿Preparado para decidir qué compensa más: tiempo libre o pensión íntegra?

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