Aunque parezca sacado de una historia inventada o de un sueño para cualquier aficionado coleccionista, este hallazgo realmente le sucedió a un hombre en Estados Unidos. Sin la intención de buscar un tesoro, Nick Mead compró un tanque T-69 para conservarlo como otro vehículo en su impresionante colección bélica. Sin embargo, se encontró con lo que podría ser una verdadera mina de oro para cualquiera: cinco lingotes de oro valorados en 2,5 millones de euros. La sorpresa fue tan grande que el hombre tardó en decidir cómo actuar, y ahora enfrenta una preocupación mayor.
El tesoro de 2,5 millones de euros hallado en un tanque
La historia de suerte de Nick Mead ha sido registrada en su canal de YouTube, donde suele compartir vídeos de sus variados objetos coleccionables relacionados con los conflictos armados de la historia. En este caso, el tanque T-69, empleado en la invasión de Irak a Kuwait en 1990, fue el escenario de un hallazgo totalmente inesperado: unos objetos inimaginables en un lugar insospechado. Junto a su hermano, al recibir el tanque en su granja, decidieron examinarlo para comprobar si estaba en buen estado. En ese proceso, en un compartimento oculto, descubrieron los cinco lingotes que podrían estar valorados en 2,5 millones de euros.
Sorprendido, Nick decidió actuar de forma precipitada. Tomó su móvil y se contactó con la policía para informar del increíble hallazgo, una decisión que cambiaría el rumbo de su historia. Aunque parecía la puerta a una vida de riquezas, pronto comenzó una búsqueda exhaustiva de los posibles dueños de los lingotes. Que hasta ahora no ha dado resultados. En varias entrevistas, el coleccionista ha expresado cierto arrepentimiento por haber informado a las autoridades. Pues, de no haberlo hecho, ya podría estar disfrutando de los 2,5 millones de euros al vender tales metales preciosos.
A pesar de que aún no hay un dueño legítimo para los cinco lingotes, una de las hipótesis que se barajan es que podrían pertenecer a una familia influyente de Kuwait que sufrió un robo durante la invasión iraquí en 1990. Los lingotes habrían sido ocultados en el compartimento secreto del tanque. Actualmente, el oro ha sido trasladado a una bóveda en Londres, donde permanecerá hasta que se cumpla con el plazo establecido. Si al cabo de ese tiempo no aparecen los propietarios, el tesoro pasará a ser de Nick.
El escondite menos pensado
El tanque T-69, de origen chino, fue utilizado en la famosa operación militar de los años 90. Mead lo recibió como parte de un trueque realizado en eBay, en el cual intercambió un cañón y un camión militar. Sin imaginar las consecuencias de este intercambio.
Además del revuelo generado por el descubrimiento de los lingotes de oro, valorados en 2,5 millones de euros, Mead mantiene la esperanza de recibir una recompensa de los posibles dueños. O, en su defecto, de poder quedarse con el oro. Con ello, planea mejorar su colección y ampliar la exposición en su granja de tanques y vehículos bélicos. Donde guarda y exhibe sus preciadas piezas históricas.