El reconocimiento puede llegar a la incapacidad permanente absoluta cuando la dependencia provoca deterioro severo o trastorno depresivo mayor. Claves para saber quién puede solicitarla y cómo se decide.
La Seguridad Social puede conceder una pensión de incapacidad permanente a trabajadores con alcoholismo cuando la enfermedad les impide trabajar. El paso por el tribunal médico resulta determinante y, aunque su valoración no es vinculante, influye en el dictamen final de la dirección provincial, que decide el grado: total o absoluta (con el 55% o el 100% de la base reguladora). Esta prestación se ajusta al grado que finalmente se reconoce.
Quién puede pedir la incapacidad permanente por alcoholismo y en qué supuestos concretos
¿En qué casos se reconoce? Campmany Abogados resume varias situaciones habituales: profesiones con contacto directo con bebidas alcohólicas, como camarero, y actividades en las que existe riesgo para la persona o para terceros, por ejemplo los conductores. Además, puede concederse la absoluta cuando la dependencia deriva en un deterioro severo o un trastorno depresivo mayor.
A continuación, una guía rápida con los escenarios más comunes citados en la práctica:
- Profesiones con contacto con bebidas alcohólicas (camarero como caso recurrente).
- Actividades con riesgo para la persona o terceros (por ejemplo, conductores).
- Dependencia que genera deterioro severo o trastorno depresivo mayor.
Tras estas situaciones, la clave está en acreditar la repercusión psíquica y funcional. El bufete recuerda que “la cuestión principal será probar que dicha enfermedad ha repercutido psíquicamente en el afectado, provocando una deficiencia de raciocinio y personalidad”.
Cómo decide la Seguridad Social: tribunal médico, informes y dirección provincial
El procedimiento pivota sobre la valoración médica. El tribunal médico examina informes y limita o no la capacidad laboral, y su opinión pesa en la resolución definitiva. Reunir documentación clínica y psicológica coherente es esencial. ¿Un consejo práctico? Preparar con antelación el historial y las limitaciones en la vida diaria. En este ámbito no hay una fecha de apertura concreta: el reconocimiento depende del expediente individual.
Antes de pedirla conviene tener clara la cuantía y el alcance de cada grado. La distinción no es menor, porque condiciona tus ingresos y tus posibilidades de trabajar en otras tareas.
Grado de incapacidad | Cuantía sobre base reguladora | Alcance laboral |
---|---|---|
Total | 55% | Inhabilita para la profesión habitual pero permite otras funciones compatibles. |
Absoluta | 100% | Inhabilita para todo trabajo, exigiendo mayor cobertura económica. |
La total protege cuando no puedes seguir en tu oficio; la absoluta cuando no puedes desempeñar ningún trabajo.
Sentencias que avalan el reconocimiento en casos de dependencia del alcohol
Hay resoluciones que ilustran cómo se aplica. En un caso, un trabajador que abrió una tienda de vinos desarrolló adicción y, después, depresión; aunque al principio se denegó, la defensa argumentó frecuentes fallos de memoria y problemas de atención y se reconoció la pensión. En otro, se otorgó gran incapacidad por encefalopatía y trastorno grave de la memoria: inicialmente había absoluta y, tras reclamar, el grado aumentó judicialmente. ¿Te ves reflejado en alguna de estas situaciones?
En conclusión, la Seguridad Social reconoce la incapacidad permanente por alcoholismo cuando la enfermedad limita de forma severa la capacidad laboral y esa limitación se acredita con informes y valoración del tribunal médico. De ahí que preparar el expediente con rigor sea determinante.