El Ministerio de Trabajo de España, bajo la dirección de Yolanda Díaz, presentó hace unos meses un innovador proyecto. Se trata de la reducción de la jornada laboral, con la que pretenden hacerla de 37,5 horas semanales. Su objetivo es incentivar a empresas de diversos sectores a adaptarse a un nuevo modelo que busca el bienestar de los trabajadores. Además, esta medida asegura una mayor productividad, lo que sería muy favorable para las compañías. Ante ello, las autoridades realizan múltiples modificaciones y uno de los nuevos tiene que ver con el registro de jornada en modalidad digital. ¿De qué se trata esto? Ahora te lo contamos de forma detallada.
Los objetivos de la implementación del registro de la jornada digital
La nueva reforma de la jornada laboral no solo incluirá una reducción semanal de dos horas y media, sino que también incluirá ciertos cambios. Entre ellos destaca la modificación al sistema actual de registro horario que realizan los trabajadores. Desde su implementación, en 2019, dicho sistema ha sido objeto de críticas por su naturaleza manual. Por ello, las autoridades pretenden digitalizar completamente el registro de jornada, eliminando por completo la utilización de papel y boli.
Con esta transformación, la Inspección de Trabajo podrá acceder a todos los datos y registros de forma remota. Se trata de una alternativa muy útil para la detección de fraudes y la supervisión de horarios laborales. Además, permitirá hacer frente a la manipulación de datos vinculados con las horas trabajadas. Recordemos que antes, los inspectores tenían que presentarse físicamente a las oficinas para revisar los registros. Estos procesos resultaban complicados y poco efectivos. Ahora, con el acceso digital, se podrá garantizar transparencia y responsabilidad.
Una gran inversión por parte del Gobierno
El Gobierno mantiene actualmente reuniones con la Patronal y los distintos sindicatos de trabajadores para llegar a un acuerdo que les permita avanzar con la reducción de la jornada laboral. Este proyecto implicaría para el Gobierno un gran esfuerzo económico. Es más, ya tiene destinado un total de 350 millones de euros para concretar el plan. Esta suma se repartirá en subvenciones directas de hasta 6.000 euros. Y si bien es cierto que la Patronal no está de acuerdo con esto y muchos grupos del Congreso se opusieron a la reforma, el objetivo del Ejecutivo está claro: quiere avanzar con esto antes del 31 de diciembre del 2025.
Otro punto a resaltar sobre la reducción de la jornada laboral es que no será una disminución directa de horas. Primero, se pasará a una reducción mínima de 38,5 horas, para luego llegar a las 37,5 horas semanales. Esta primera baja sería comenzar antes que finalice el 2024, aunque todavía el plan está en tratativas entre las partes involucradas. La confirmación de la medida saldrá a la luz en las próximas semanas, una vez que terminen las reuniones entre el Gobierno, la patronal y los sindicatos.
Por último, hay que hablar de uno de los puntos más importantes de la medida. Además del registro de jornada digital, otro eje central del proyecto es que la reducción de horas no suponga un recorte salarial. La idea es que los trabajadores mantengan su sueldo, lo que significaría un aumento de sueldo por hora trabajada. Dicho detalle no convence a la patronal, quien ha confirmado su posición negativa y advierte que esta medida sería perjudicial para la economía.
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