El mundo de los coleccionistas de monedas está en auge, especialmente desde el cambio de la peseta al euro el 1 de enero de 2002, cuando unas monedas entraron en circulación y otras salieron definitivamente. Desde entonces, las pesetas se convirtieron prácticamente en objetos de colección, con un valor más sentimental que económico. Entre estas monedas, hay algunas especialmente valiosas, que se han convertido en el objetivo de los numismáticos, quienes buscan las piezas más preciadas en España. Un caso especial es el de una antigua peseta con la cara de Franco, cuyo valor aumenta con el paso del tiempo.
La peseta con valor creciente a lo largo de los años
Aunque ya no están en circulación, algunas pesetas, como la de Franco de 1946, se encuentran todavía en manos de personas que desconocen su verdadero valor. Esta moneda, acuñada en un contexto histórico particular, nació en 1946, cuando el Estado español decidió lanzarlas en medio de una Europa marcada por la tensión política. En aquellos años, el interés del gobierno se centraba en otros asuntos de gran relevancia para la nación, y fue en este contexto que el escultor Mariano Benlliure diseñó la imagen de Franco en más de 1.000 pesetas.
Con el paso de las décadas, de las 1.000 pesetas emitidas originalmente, se estima que solo quedan unas 150 en manos de españoles, lo que las hace todavía más exclusivas. Aunque la primera serie salió en 1946, la acuñación se repitió en 1947 y 1953, produciendo más monedas con el rostro de Franco. El estado de conservación de cada ejemplar también influye considerablemente en su valor de mercado, así que podrías ser uno de los afortunados que tiene una de estas joyas escondida en un cajón. Es hora de buscar en los rincones más remotos de casa para ver si posees una de estas valiosas monedas.
El valor ascendente de esta reliquia de la numismática
Aunque han pasado ya más de 70 años desde la creación de esta peseta con el rostro de Franco, y los tiempos han cambiado, los coleccionistas siguen persiguiendo estas piezas únicas. Entre las ventas recientes de esta moneda especial, encontramos una transacción en 2004 por 2.700 euros, otra en 2005 por 2.500 euros, y otra en 2008 por 3.000 euros. La venta más interesante tuvo lugar en 2022, cuando una de estas monedas alcanzó los 7.500 euros en un portal de subastas en Francia, lo que sugiere que el mercado internacional también está valorando estas monedas. Según los expertos, el valor de estas piezas podría llegar fácilmente a los 10.000 euros, debido a la inflación y a la antigüedad de la moneda.
Lo más particular, además del rostro de Franco en la peseta, es que su diseño rompió con la tradición de la época, cuando era más común que aparecieran objetos en lugar de rostros. Esta moneda es un ejemplo fascinante de la historia española y de cómo las pesetas han pasado de ser un simple método de pago a convertirse en tesoros de colección. Si quieres descubrir más sobre el mundo de la numismática y sus curiosidades, visita nuestro portal para estar al tanto de lo último en este ámbito tan particular.