Las monedas de 5 pesetas de Franco acuñadas en 1949 esconden combinaciones de estrellas que multiplican su valor. Descubre cuáles son, cómo reconocerlas y qué exige el mercado para pagar una auténtica fortuna.
¿Tienes guardada alguna peseta en un cajón? Tal vez estés sentado sobre una mina: los escasos ejemplares de 5 pesetas de 1949 pueden pagarse por más de 30.000 € si cumplen ciertos requisitos de rareza y conservación.
Cómo identificar las monedas de 5 pesetas de 1949 más valiosas paso a paso
El primer detalle que debes examinar son las dos pequeñas estrellas situadas a ambos lados de la palabra “CINCO”. En su interior se grabaron números de control que hoy marcan la diferencia entre una pieza corriente y otra capaz de batir récords. Saca la lupa y comprueba la pareja de cifras.
Combinación de estrellas | Precio medio en subasta |
---|---|
19 49 | 20 € |
19 50 | 20 € |
19 51 | 6.000 € |
19 52 | 20.000 € – 36.000 €* |
E 51 | 5 € |
Los expertos en numismática solo conocen 14 ejemplares con la estrella 19 52, de ahí su cotización estratosférica. Las de 19 51 se ven algo más y, por tanto, bajan de precio… pero no mucho.
Por qué la Guerra de Corea disparó el valor de estas pesetas de níquel
En plena Guerra de Corea (1950-1953) el níquel se encareció tanto que la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre decidió fundir la mayoría de los ‘duros’ de 1951 y 1952 antes de que salieran a la calle. Las pocas monedas que esquivaron el horno acabaron en colecciones privadas, convirtiéndose décadas después en las joyas que todos los coleccionistas ansían.
Tener la combinación de estrellas correcta no garantiza un premio gordo. La pieza debe presentar cero desgaste, ningún arañazo y el brillo original. En jerga numismática se denomina “sin circular”. ¿Quieres comprobarlo?
- Color uniforme y satinado: sin manchas ni matices oscuros.
- Relieve intacto: las líneas del escudo y el rostro de Franco deben apreciarse nítidas.
- Cantos limpios: ni golpes ni mellas en el borde estriado.
Si falla uno solo de estos puntos, el precio puede desplomarse en segundos.