La reducción de sucursales se intensifica en plena racha de beneficios récord, con Bankinter como excepción al abrir una nueva oficina en 2024.
El sector bancario continúa achicando su presencia física en España. En el último ejercicio, las grandes entidades del IBEX 35 cerraron 145 oficinas, dejando el total en 9.840 y marcando un nuevo mínimo histórico. Paradójicamente, ese ajuste se produce en un año donde las ganancias superaron los 32.000 millones de euros. Bankinter fue el único banco que nadó a contracorriente: en vez de cerrar, abrió una sucursal en Puerto de Sagunto (Valencia), con lo que eleva su red a 446.
¿Te has preguntado qué implica para tu día a día la desaparición de oficinas de tu entidad habitual? La tendencia viene de lejos, iniciada hace más de una década y acelerada por la crisis financiera, las fusiones y el auge de las gestiones digitales. Entre estas fusiones pendientes destaca la posible compra del Sabadell por parte de BBVA, que según los expertos traería consigo otro recorte de la red comercial.
Los planes de reestructuración del sector bancario y sus efectos laborales en toda España
CaixaBank lideró el cierre de sucursales en 2024 con 48 clausuras, si bien continúa siendo la entidad más implantada en el territorio, con más de 3.500 oficinas. Le sigue Santander, que eliminó 47, quedándose con 1.827 en España (y recortando más de 530 a nivel Grupo). A su vez, BBVA solo echó el candado a una sucursal en el país, pero ha reducido unas 200 en el conjunto de sus mercados.
En paralelo, Sabadell culminó 45 cierres, cifra que subiría a 70 si se cuentan las oficinas de su filial británica TSB. Unicaja, por su parte, bajó la persiana de 5 establecimientos, quedándose con 952. Frente a todos ellos, Bankinter actuó como un verso libre al abrir una oficina, haciendo caso omiso a la oleada de reducciones.
¿Cómo influye la reducción de sucursales en la cohesión territorial y en el acceso financiero?
El cierre de oficinas golpea con especial dureza a las zonas rurales, donde muchos vecinos dependen de la atención presencial. Las autoridades han expresado su inquietud ante la posibilidad de que la fusión BBVA-Sabadell conlleve más recortes, afectando a la inclusión financiera de colectivos vulnerables. Por otro lado, los defensores de estas operaciones sostienen que, ante los modelos de banca digital, el mantenimiento de una red sobredimensionada supone un coste difícil de asumir. Para ilustrar el panorama, aquí tienes una tabla con los datos de cierres en 2024:
Banco | Oficinas cerradas en 2024 | Oficinas totales en España |
---|---|---|
CaixaBank | 48 | >3.500 |
Santander | 47 | 1.827 |
Sabadell | 45 | — |
Unicaja | 5 | 952 |
BBVA | 1 | 1.881 |
Bankinter | -1 (abrió 1) | 446 |
Como puedes comprobar, las cifras evidencian el ajuste que vive la banca en su red física. Sin embargo, la puerta sigue abierta a nuevas reducciones si las fusiones planeadas se hacen efectivas.
Una futura fusión bancaria en España
Estos cuatro puntos son que indican cómo afectará la situación del sector de los bancos en España:
- Menos oficinas, mayor ahorro de costes: las entidades justifican los recortes para mejorar su rentabilidad y afrontar desafíos tecnológicos.
- Desempleo y movilidad interna: aunque los bancos han reducido personal, muchos intentan recolocar a sus empleados en puestos digitales o de asesoramiento especializado.
- Posible exclusión financiera: municipios de menor población temen quedarse sin oficina, dificultando la atención a las personas mayores o sin acceso digital.
- Visión gubernamental: se vigila que no se pierda competencia en el sector ni se acentúen las desigualdades territoriales.
¿Y ahora qué? La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia estudia las consecuencias de nuevas adquisiciones, mientras el Gobierno sopesa imponer condiciones para preservar la cohesión territorial. Si el BBVA concreta su OPA sobre el Sabadell, habrá que ver cuántas sucursales se mantienen abiertas y en qué lugares.