La medida continúa extendiéndose este año en los ciclos formativos, con un salario mínimo del 60% el primer año y cotización obligatoria para todo el alumnado desde 2024.
La implantación de la nueva ley de Formación Profesional sigue avanzando en 2025 y consolida un cambio clave: la remuneración de las prácticas en empresa. Aunque el régimen intensivo ya paga desde el primer día mediante contrato de formación, el resto de modalidades continúa incorporándose de forma gradual hasta 2028. La referencia salarial mantiene el mínimo del 60% el primer año y del 75% el segundo.
Qué implica en 2025 la transición hacia prácticas de FP remuneradas y por qué afecta a todo el alumnado
La Ley Orgánica 3/2022 convirtió las prácticas en un módulo obligatorio dentro del ciclo formativo. Desde su entrada en vigor, el régimen intensivo debe incluir un contrato de formación, lo que garantiza salario. Para el resto del alumnado, el sistema avanza hacia la remuneración progresiva, prevista desde el segundo trimestre del primer año, después de completar los tres meses de formación en prevención de riesgos laborales.
¿Cobra ya todo el estudiantado en 2025? Todavía no. Muchas empresas están adaptándose y el proceso se desplegará por fases hasta 2028. De ahí que convivan prácticas salarizadas con otras que aún no se han incorporado al modelo retribuido.
Cómo avanza en 2025 la adaptación hacia la remuneración obligatoria y cómo afecta la duración mínima del módulo
En 2025 se mantiene la misma regla sobre duración: las prácticas deben ocupar al menos el 25% del ciclo, tanto en Grado Medio como en Grado Superior. Este periodo en empresa sigue siendo esencial para completar la preparación profesional.
La obligación de remunerar se aplica de forma inmediata en el régimen intensivo, mientras que el resto continúa incorporándose durante esta etapa de transición. Por lo tanto, las diferencias entre centros y compañías siguen siendo habituales este año. ¿Está tu empresa o tu instituto dentro de los que ya aplican la remuneración? Depende de su ritmo de adaptación.
Cómo se establece en 2025 el salario de las prácticas de FP según el SMI vigente en cada momento
En todo 2025 continúa aplicándose el mismo criterio: el salario lo marca el convenio colectivo correspondiente, pero nunca por debajo del 60% el primer año y del 75% el segundo. Para realizar el cálculo se utiliza el Salario Mínimo Interprofesional vigente en el momento de las prácticas. Esto quiere decir que cualquier actualización del SMI repercute automáticamente en la retribución del alumnado.
Este es el esquema salarial que continúa en vigor:
| Periodo / régimen | Porcentaje mínimo sobre salario por convenio | Referencia salarial |
|---|---|---|
| Primer año | 60% | Salario Mínimo Interprofesional (SMI) |
| Segundo año | 75% | Salario Mínimo Interprofesional (SMI) |
| Régimen intensivo (FP) | Remuneración obligatoria con contrato | Contrato de formación en prácticas |
Como puede verse, el sistema mantiene un diseño progresivo y alineado con el SMI, lo que aporta estabilidad tanto a empresas como a estudiantes.
Qué supone en 2025 la cotización obligatoria del alumnado en prácticas y cómo se reparten los costes
La cotización lleva en vigor desde el 1 de enero de 2024 y en 2025 continúa aplicándose a todas las prácticas, remuneradas o no. La Seguridad Social asumió en 2024 el 95% de las cotizaciones y el Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes el 5%. Las comunidades autónomas también mantienen su aportación media de 18 euros anuales por estudiante.
En las prácticas que aún no son remuneradas sigue vigente el criterio de cómputo: cada día realizado equivale a 1,61 días cotizados, sin superar los días del mes.
En términos prácticos, esto garantiza dos beneficios esenciales:
- Los periodos de prácticas se reconocen como cotizados, lo que incrementa derechos futuros, también en materia de pensiones.
- Todo el alumnado mantiene protección de la Seguridad Social, incluida la cobertura ante accidentes durante las prácticas.
De hecho, aunque el modelo salarial aún está en fase de implantación, la cotización ya ofrece una red de seguridad sólida. ¿Lo mejor? La carrera de cotización del estudiantado empieza mucho antes que en generaciones anteriores.
