Tienes que prestar especial atención a tu nómina porque podrías estar cobrando menos de lo que te corresponde por tu trabajo. De hecho, hay un error común en la nómina que te puede costar dinero. La nómina es un documento sumamente importante para los trabajadores. Además de incluir en ella las retribuciones salariales, dispone de otros apartados clave para el momento presente y para el futuro. Ejemplos de ellos son los devengos, las deducciones y las retenciones.
Aun cuando la nómina es uno de los documentos más importantes en la vida de todo trabajador, saber leerla y entenderla puede verse como una misión imposible. Quienes no cuentan con conocimiento fiscal o derecho laboral pueden verse abrumados/as ante la diversidad de casillas y conceptos, que no son tan sencillos de entender a simple vista (aunque hay un truco para entenderla).
Si bien la mayoría de las nóminas disponen de diseños diferentes, deben ajustarse a un modelo establecido, según regala la Orden ESS/2098/2014 (disponible en el Boletín Oficial del Estado), respetando lo declarado en el artículo 104.2 de la Ley General de la Seguridad Social. Esto quiere decir que toda nómina debe seguir un formato específico y cumplir con una serie de conceptos obligados.
¿Qué hacer para entender la nómina del trabajo?
Gracias el modelo establecido, los trabajadores pueden entender cómo funciona a grandes rasgos su nómina independientemente de la compañía en la que trabajen, ya que los conceptos mostrados siempre son los mismos. Aquellos a los que les cueste un poco más, con una mínima asesoría o fijándose en tres partes estratégicas de la nómina pueden saber si están cobrando lo acordado o no. Existen tres elementos nómina en los que el usuario debe fijarse, pero sin dejar de mirar la parte de devengos y deducciones, ya que todo está relacionado entre sí.
¿Qué son los devengos y deducciones de la nómina?
Los devengos son todos los ingresos generados por el trabajador por los servicios prestados durante el mes. Es decir, el salario total bruto del trabajador antes de que se apliquen las retenciones correspondientes. Los devengos de una nómina laboral pueden ser salariales y no salariales. Los primeros abarcan conceptos como el sueldo base, complementos salariales (como antigüedad o grado de peligrosidad de la actividad), horas extras, gratificaciones extraordinarias y salario en especie.
Por otra parte, los no salariales o deducciones corresponden a las indemnizaciones, dietas, gastos vinculados al transporte y prestaciones de la Seguridad Social, entre otros. Los devengos versan sobre la suma total de percepciones y las deducciones los descuentos aplicados a ese importe. La “ganancia” se especialmente “afectada” por las retenciones del IRPF y las cotizaciones a la Seguridad Social.
Los 3 apartados más importantes de la nómina
Hay 3 apartados en la nómina que son especialmente importantes y muestran si el usuario está cobrando lo que debe: salario neto, antigüedad y grupo profesional. El salario neto es el importe íntegro que recibe el trabajador en su cuenta bancaria. Es decir, el salario bruto con el descuento de las cantidades que van dirigidas al IRPF (Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas) y cotizaciones a la Seguridad Social.
La segunda sección de la nómina que marca la diferencia es la antigüedad, que aparece en la parte superior de la nómina y debe coincidir con el primer día que se empezó a trabajar en la compañía o la fecha de la firma del contrato de trabajo. No cuentan como antigüedad los anteriores contratos de becarios, pasantes o actividades efectuadas como prácticas curriculares para estudios universitarios, ya que no se consideran contratos de relación laboral.
El tercer apartado que debes revisar para descubrir de si efectivamente estás recibiendo lo que debes es el de grupo profesional, que suele ubicarse entre el número de afiliación a la Seguridad Social y el grupo de cotización. El grupo es importante porque es la categoría con la que la Seguridad Social clasifica a los empleados según el tipo de trabajo que hacen. Ayudan a determinar su cotización en la Seguridad Social. Además, vienen asociadas a un salario mínimo y la aplicación de determinados convenios colectivos.
Ya sea junto a un profesional o con el conocimiento que hayas conseguido en una reunión con un profesional, puedes revisar tu nómina. Así quedará al descubierto si, efectivamente, estás recibiendo lo que debes mes a mes. Asimismo, existen otros 3 datos claves de tu nómina, que sirven para calcular el finiquito que te pertenece por año trabajado.